martes, 12 de junio de 2012

"CRÍTICOS EN LA MIRA"

   En el capítulo "Juan y la Crítica", de la serie televisiva "Todos contra Juan", se pueden observar las distintas posturas que adoptan tanto los críticos como los artistas "criticados".
   En este somero ensayo intentaré simplificar algunas cuestiones vinculadas con el ejercicio de una profesión que tiene como principal destinatario al público (lector, oyente, televidente). Tanto es así que cuando en la tira aparece por primera vez el personaje actoral de Juan Peruggia (protagonizado por Gastón Pauls), éste se hace eco de la crítica despiadada de un sujeto que lo tiene en la mira, y que ejerce una tipología patológica extremadamente negativa para con él.
   Aquí se presenta el primer conflicto, ya que como decíamos, la crítica va dirigida en primera instancia hacia el público y no hacia el artista.
   Es más, ante esta circunstancia Juan tiene dos caminos: iniciar acciones legales contra el crítico o pretender un derecho a réplica que nunca consigue.
   Otros críticos en cambio adoptan alternativas menos virulentas para con Juan y deciden darle una nueva oportunidad.
   En realidad los únicos que lo critican favorablemente (y no podía ser de otra manera) son su amigo y su representante, quien contacta con un director y le consigue un papel protagónico para su próxima actuación junto a Mirtha Busnelli. A su vez Juan critica desfavorablemente a Mirtha por su cleptomanía o por la manía de robar objetos a sus compañeros y conocidos.
   También se puede apreciar como en una fiesta organizada por el director que trabajará con Juan y con Mirtha, dicho director le pasa un sobre con dinero al mismo crítico que juzgara a Peruggia.
   Una reflexión especial merecen las artimañas utilizadas por Juan en sus vídeos caseros para convencer, a potenciales productores o directores, de sus capacidades actorales.
   Por último, las críticas de este capítulo de "Todos contra Juan" no terminan ahí, ya que la pareja de la amiga de Peruggia critica permanentemente a ésta por no conservar el orden en su departamento.
   Además, otra amiga de Juan se hace pasar por crítica gastronómica (en realidad no lo es) en varias ocasiones para invitar a su amigo a comer e irse de los restaurantes sin pagar.
                                                                                                                       Por Jorge Ferrera

No hay comentarios:

Publicar un comentario